ULAM: 10 años de lucha y resistencia en defensa de los derechos y la Madre Tierra
2 junio 2022Ají Chombito
3 junio 2022El 3 de marzo de 2016, Honduras y varios otros lugares del mundo se estremecieron con la noticia del asesinato de la lideresa indígena Lenca y defensora de los derechos humanos Berta Cáceres, cofundadora y coordinadora general del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH). Tan lamentable hecho hizo visible la importancia de sus acciones en la defensa de los derechos humanos, así como las serias vulnerabilidades, precariedades y violencias que ella tuvo que enfrentar.
En los últimos años, la situación de las personas que defienden los derechos humanos en el continente americano se ha venido deteriorando, con una incidencia particularmente alta en el caso de quienes defienden los derechos humanos frente a los abusos de los megaproyectos. Muchas de esas personas son mujeres, principalmente indígenas, afro descendientes y campesinas.
La seriedad de la situación que enfrentan las defensoras indígenas exige que haya un cambio; y en éste sentido es importante ofrecerles mejor apoyo, colaboración y protección. Pero para ello es indispensable entender mejor su experiencia y liderazgo en la defensa de los derechos humanos frente a los abusos de los mega-proyectos. Este texto expone algunas breves consideraciones, y para ello se estructura en tres partes.
La primera parte presenta el contexto general de las personas defensoras de derechos humanos en la región y las violencias que ellas enfrentan; la segunda ofrece algunos puntos a tener en cuenta sobre las experiencias de liderazgo de las defensoras indígenas en un contexto de relaciones de poder desbalanceadas y desfavorables y, la tercera, cierra con algunas ideas en forma de conclusión.
Antes de empezar, es importante aclarar que las defensoras y los defensores de derechos humanos (DDH) son personas que, individual o colectivamente, toman acción para detener violaciones de derechos humanos, o para promover el disfrute efectivo de estos derechos. Las y los DDH se definen por lo que hacen, no por otras calidades (por ejemplo, si reciben pago o si pertenecen a una organización). Del artículo 1 del Declaración de DDH adoptada hace 20 años por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se desprende claramente que este es un derecho de toda persona [1]. Siendo un derecho como tal, hay obligaciones específicas para los Estados y responsabilidades para los actores no estatales, incluidas las empresas.
Contexto general: una situación apremiante
Según información del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, tres de cada cuatro asesinatos de defensores de derechos humanos contabilizado en el mundo en 2016 ocurren en las Américas [2]. En 2017, se registraron 312 asesinatos de DDHs en el mundo y el 67% de ellos fue de DDHs en el contexto de megaproyectos, varias de ellas indígenas y/o mujeres [3]. En 2016, de los 200 asesinatos de personas defensoras del territorio y los bienes naturales, 60% ocurrieron en América Latina, 40% fueron indígenas y 10% mujeres [4]. En años anteriores las cifras fueron un poco menores, pero igualmente alarmantes.
Lamentablemente, los asesinatos son sólo una de las muchas modalidades de ataques contra DDHs. También han sufrido amenazas, violencia sexual, criminalización, difamación, destrucción de cultivos, etc. Entre 2015 y 2017, se registraron más de 1,000 casos de ataques contra quienes defienden los derechos humanos de los abusos cometidos por las empresas: 66% ocurrieron en América Latina, 58% fueron contra indígenas, el 39% fueron en el sector minero, el 19% en el sector de las energías renovables y el 18% en el de la agroindustria. Los ataques más frecuentes fueron asesinatos (28%), criminalización (28%) y amenazas de muerte (25%) [5].
Cuando la persona defensora es mujer y/o indígena, las agresiones son acentuadas en razón de ello. Berta Cáceres, por ejemplo, fue continuamente intimidada, fue criminalizada y fue amenazada de muerte y violación. En las últimas semanas antes de su asesinato, alcanzó a presentar 33 denuncias ante el Ministerio Público de Honduras por las amenazas más recientes, pero ninguna fue investigada.
La experiencia especifica de defensoras ante megaproyectos
Dentro de ese panorama alarmante, la experiencia de las mujeres indígenas que están liderando la defensa de los derechos humanos frente a los abusos de los megaproyectos está también definida por quienes son y por lo que hacen en contextos con dinámicas específicas. Ellas son indígenas, lideresas, y defensoras de comunidades marginadas; con sus acciones están enfrentando poderosos adversarios; y ejercen el derecho a defender los derechos humanos de cara a una violencia extrema. Estas lideresas defensoras indígenas han alcanzado logros muy importantes para ellas y sus comunidades, lamentablemente muchas veces a altísimos costos personales, para sus familias, organizaciones y comunidades. Todo lo cual las sitúa en circunstancias especiales que han de entenderse bien para ofrecerles protección, colaboración y apoyo adecuados y efectivos.
Estos son unos breves puntos que considerar:
En América Latina hay 670 pueblos indígenas reconocidos. Son el sector social en mayor situación de desventaja, con más de 500 años de discriminación y despojo de sus recursos. Su existencia física y cultural se pone en grave riesgo con la llegada de los megaproyectos a sus territorios. Por ello, las acciones de las lideresas indígenas en defensa de los derechos humanos son cruciales, no sólo para frenar los abusos de hoy, sino para prevenir las consecuencias que tendrán para futuras generaciones. Estas mujeres son conscientes de “ser las defensoras de hoy y los ancestros femeninos de las futuras generaciones” [6].
El crecimiento económico de varios países de la región está sujeto a estos proyectos. No existe un umbral específico para definir un megaproyecto, pero la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) considera determinantes: su magnitud o dimensión, y el impacto humano y social de su actividad, teniendo en cuenta las circunstancias y contexto de las personas afectadas [7]. Estos proyectos incluyen, por ejemplo: la minería, infraestructura, parques eólicos y represas hidroeléctricas. Al enfrentar los abusos de los megaproyectos, ellas están enfrentando los actores más poderosos del mundo: los Estados, las empresas, el crimen organizado, los liderazgos machistas, entre otros.
El ejercicio de la defensa de los derechos humanos por parte de las lideresas indígenas es de cara a una violencia extrema. Esta violencia es múltiple y entrecruzada, e incluye la violencia contextual general (homicidios, feminicidios, militarización, etc.), las desigualdades, la impunidad, la corrupción, las represalias y la creciente tendencia anti derechos en Latinoamérica.
Son muchas las barreras, discriminaciones y violencias que las lideresas indígenas tienen que enfrentar en los distintos ámbitos de su vida. Aun con la visibilidad alcanzada es común que los Estados y las empresas busquen negociar con los líderes hombres. Aún prevalece la exclusión de las mujeres indígenas de las posiciones de toma de decisión. Las lideresas desempeñan papeles fundamentales en la organización de sus comunidades frente a los abusos de los megaproyectos, pero a menudo no son reconocidas, apoyadas o valoradas. Es frecuente que sean criticadas y denigradas por no cumplir con roles tradicionales asociados con lo femenino y por ser indígenas.
A pesar de encontrarse en contextos adversos y relaciones de poder desbalanceadas y desfavorables, las defensoras alcanzan importantes éxitos en materia de derechos humanos. Berta Cáceres, por ejemplo, fue ampliamente conocida como «la activista que le torció la mano al Banco Mundial y a China» [8], luego de que estos actores económicos se retiraran del proyecto hidroeléctrico Agua Zarca en territorio Lenca, reconociendo la conflictividad social [9]. Pero ese fue sólo uno de sus muchos éxitos. Otros éxitos de ella y de otras lideresas en situaciones similares incluyen surgir como defensoras, crear organizaciones militantes, impactar en las decisiones de las empresas y las políticas del Estado, y transformar positivamente la realidad de sus comunidades. Entender su experiencia de una forma integral también implica considerar estos logros para respetarlos, aprender de ellos y multiplicarlos.
Algunas ideas en forma de conclusión
Como bien dijo en varias ocasiones Berta Cáceres, “la lucha es contra el sistema racista, capitalista y patriarcal” [10]. En este sentido, es fundamental para cualquiera que quiera actuar con aliadx tomar en cuenta la complejidad de la lucha de las mujeres indígenas que lideran la defensa de los derechos humanos frente a los abusos de los mega-proyectos. Esa complejidad recoge tanto sus experiencias de éxito como sus experiencias de violencia y discriminación. Entenderla en toda su magnitud es central para poder abordar su situación de una forma más efectiva y así contribuir a mejorarla.
Las agresiones contra las lideresas indígenas en represalia por sus acciones en defensa de los derechos humanos son manifestaciones de relaciones de poder, de engranajes de poderes e incluso de colusiones de poderes (Estatales y no-estatales, legales e ilegales). Entender mejor su experiencia, como víctimas de violencias pero también como lideresas y defensoras en contextos y circunstancias específicas donde se enfrentan a actores potentes, es imperante.
Foto: Altar en honor a Berta Cáceres, elaborado durante la protesta en rechazo por su asesinato que tuvo lugar frente a la Embajada de Honduras en el Reino Unido, el 7 de marzo de 2016. Fotografía de Nancy Tapias.
Notas
[1] ONU. (1998). Declaración sobre las Defensoras y los Defensores de los Derechos Humanos, Asamblea General. Disponible en: http://www.ohchr.org/Documents/Issues/Defenders/Declaration/declaration_sp.pdf
[2] Oficina de la ONU para los Derechos Humanos y Comisión Interamericana de Derechos Humanos (2017) / OACNUDH, & CIDH. (2017). La OACNUDH y la CIDH lanzan un plan de acciones conjuntas para contribuir a la protección de las personas defensoras de derechos humanos en las Américas. Disponible en: http://www.ohchr.org/SP/NewsEvents/Pages/DisplayNews.aspx?NewsID=22301&LangID=S
[3] Front Line Defenders. (2017). Annual Report on Human Rights Defenders at Risk in 2017. Disponible en: https://www.frontlinedefenders.org/en/resource-publication/annual-report-human-rights-defenders-risk-2017
[4] Global Witness. (2017). Defenders of the Earth: Global killings of land and environmental defenders in 2016.Disponible en: https://www.globalwitness.org/en/campaigns/environmental-activists/defenders-earth/
[5] Business & Human Rights Resource Center / BHRC. (2018). Attacks on HRDs in the area of business and human rights: 2016 vs. 2017. Disponible en: https://www.business-humanrights.org/en/key-findings-from-the-database-of-attacks-on-human-rights-defenders-feb-2017
[6] Notas de trabajo de campo.
[7] CIDH. (2015). Pueblos indígenas, comunidades afrodescendientes y recursos naturales: protección de derechos humanos en el contexto de actividades de extracción, explotación y desarrollo. Disponible en: http://www.oas.org/es/cidh/informes/pdfs/IndustriasExtractivas2016.pdf
[8] BBC Mundo. (2016). “Honduras: matan a Berta Cáceres, la activista que le torció la mano al Banco Mundial y a China.” Disponible en: http://www.bbc.com/mundo/noticias/2015/04/150423_honduras_berta_caceres_am#orb-banner
[9] Sinohydro Group. (2013). Response to report by Rights Action about alleged violence & intimidation against Lenca indigenous communities related to the constructions of Agua Zarca dam, Honduras. Disponible en: https://www.business-humanrights.org/it/node/77673
[10] “Berta Caceres acceptance speech, 2015 Goldman Prize ceremony,” disponible en: https://www.youtube.com/watch?v=AR1kwx8b0ms
Nancy Tapias Torrando
Nancy R. Tapias Torrado es una abogada colombiana especializada en derechos humanos, con más de 15 años de experiencia. Actualmente está basada en Montreal desde donde adelanta el trabajo de campo de su doctorado en sociología con la Universidad de Oxford, Inglaterra. Su estudio se enfoca en las experiencias de éxitos de las mujeres indígenas que lideran la defensa de los derechos humanos frente a los abusos de los megaproyectos en América Latina, de cara a una violencia extrema.